Hola a todos los que por alguna razón del destino han caído en mi blog. Soy Maeri y esta es la primera entrada del que (espero) se convertirá en el sitio en el que podré almacenar todos mis procesos, fotografías, manuscritos y cosas que voy creando con el fin de convertirme en una novelista. "Un lugar dónde guardar mis cachivaches", como le dije a la amiga que tenía a mi lado cuando abrí el sitio.
Vayamos al tema que da título a la entrada: ¿cómo una mujer de pronto despierta y decide que quiere escribir novelas? Bueno, les diré que no fue tan "de pronto" como acabo de escribir, en realidad fue un proceso largo... más bien, creo que fue una decisión de siempre.
Desde niña he tenido ese gusanito travieso en la cabeza, que despierta y se retuerce de la emoción cuando se imagina las historias que hay (o podrían haber) detrás de un parque lleno de flores, una estación de trenes abandonada o una carretera que parece infinita. Y desde aquel entonces recuerdo acompañar esas historias con dibujos de osos deformes o perros que tenían cuerpo de rectángulo.
Fue masomenos durante esas épocas que conocí el mundo del animé, que en aquel entonces era conocido como "caricatura" y que, no voy a negar, tuvo (y todavía tiene) una gran influencia en mis dibujos. Había algo único en esos ojos grandes y vestimentas exóticas que hacían a una creer que todo era posible: que hay magia dentro de cada persona, que el amor puede evitar guerras y que el destino siempre nos llevará al lugar en donde debemos estar si somos fieles a nosotros mismos.
Ese y otros pensamientos me han dado fuerza en varias etapas de mi vida y son lo que busco plasmar en mis historias.Pero no todo es color de rosa. Descubrir que mis garabatos no estaban ni cerca de la imagen que tenía en mi cabeza fue frustrante; no poder estudiar una carrera en artes para mejorar fue el doble de frustrante; ver cómo las ocupaciones del día a día me iban absorbiendo y alejando de lo que aspiraba lo fue más. Sin embargo, creo que Dios no te da un sueño sin la capacidad para cumplirlo.
Y es así que, después de años de estudiar de mis propios libros de dibujo, de participar en coloquios de cómic, diseño, animación; de adentrarme en la lectura de libros clásicos, así como de cómics y manga, y de uno que otro taller de escritura, es que parto a esta aventura que se llama "crear novela ilustrada". Con nada más que unas hojas de papel, un lápiz, un bolígrafo y el apoyo de todos aquellos que desen unírseme.
Porque la ficción no sirve solo para "pasar el rato" o "desconectarse del mundo"; tampoco para plasmar fantasías grotescas de un escritor que quiere ganar fama con morbo. La ficción también puede enseñarnos, guiarnos, sanar corazones... y ayudar a dejar el mundo en mejores condiciones de cómo lo encontramos.
Eso es lo que creo.


No soy creyente, pero esta frase es oro: "Dios no te da un sueño sin la capacidad para cumplirlo". Resume todo lo que un artista, o cualquier persona, debe tener en cuenta para seguir adelante.
ResponderEliminarExacto. Todos nacemos con sueños y con habilidades para llegar a ellos. Tal vez a unos nos tome más tiempo que a otros, pero lo importante es siempre seguir adelante.
ResponderEliminar